Las clases semanales de apoyo escolar se realizan en grupos de entre 4 y 7 estudiantes que trabajan de manera individual sus temarios escolares, aunque las rutinas de técnicas de estudio son  practicadas por todas/os. Así los hábitos se van adquiriendo por imitación.

Cada grupo pasa por tres etapas:

Inicio

Al llegar al aula se prepara el cuaderno de PLANIFICACIÓN para apuntar las tareas de esa jornada, calculando los tiempos que llevará cada tarea. En esta etapa se realizan actividades de concentración, con las cuales se pretende conseguir un rendimiento óptimo de la jornada.

Desarrollo

Se completan las tareas escolares, consultando dudas y practicando los conceptos nuevos mientras se comprueba que el tiempo está bien gestionado.

Refuerzo

Una vez completadas sus tareas, por orden de prioridad se lee, resume o prepara simulacros de exámenes de los temas actuales de cada asignatura.

Esta metodología aporta cimientos para llevar adelante sus aprendizajes con autonomía y adquirir hábitos de estudio sostenibles para todas las etapas escolares.