Saber usar las técnicas de estudio es sinónimo de trabajo constante, estratégico y concentrado.
Es preciso planificar por adelantado los temas que se trabajarán durante cada trimestre y, con tiempo, empezar a leer y realizar los mapas mentales o resúmenes de los temas que podemos adelantar por cuenta propia. De esta manera, tendremos la mitad del trabajo asimilado, con lo cual, los días de evaluaciones sólo nos quedarán los repasos de ejercicios y simulacros de exámenes. Para poder llevar a cabo esta tarea con eficacia, es importante acompañar el trabajo académico con una buena gestión emocional, sobre todo: motivación, concentración y tolerancia a la frustración.
Por lo tanto, aplicar las técnicas de estudio supone una mayor autonomía, eficiencia, una buena gestión del tiempo, una reflexión constante sobre su desempeño y un avance continuo. Seguir un método concreto a la hora de estudiar las asignaturas es esencial para poder organizarse, aprender lo esencial, y a su vez tener tiempo para descansar.
El curso se desarrollará en 18 sesiones individuales en las cuales se explicarán las técnicas de estudio y cómo aplicarlas eficazmente.
Los objetivos son:
Las competencias a desarrollar son: